El aislamiento térmico inyectado es una muy buena opción para mejorar la eficiencia energética de la vivienda sin realizar obras, pero cada vivienda tiene sus características y hay que saber escoger el material adecuado.
Actualmente en el mercado existen 4 grandes alternativas en aislamiento térmico inyectado:
Existen una serie de variables técnicas que hay que analizar para poder escoger el material que mejor se adapta a las características de cada obra. Muchas empresas trabajan únicamente con un producto y significa que en muchos casos se inyecta un producto que no es el más adecuado.
En Aislacontrol analizamos múltiples factores tales como:
- Ecológico. Consumo de energía y emisión de CO2 en su fabricación
- Capacidad de aislamiento del frío del invierno
- Capacidad de aislamiento del calor del verano
- Capacidad de relleno de cámaras más de 5cm
- Capacidad de relleno de cámaras de menos de 5cm
- Diámetro de perforación mínimo
- Número de perforaciones necesarias
- Clasificación al fuego
- Transpirabilidad al vapor de agua
- Resistencia a filtraciones de agua
- Precio
A modo de ejemplo:
- Aquellas viviendas que sufran de forma clara la falta de aislamiento térmico contra el calor del verano deben aislar la vivienda con celulosa ya que la capacidad de mantener el aire fresco en las habitaciones abuhardilladas aisladando con celulosa es muy superior a cualquier otro material mineral.
- Si tenemos un Hospital que debe mejorar el aislamiento térmico hay que actuar con aislamiento a base de lanas Minerales ya que la clasificación A al fuego es un requisito técnico. Para el uso en viviendas puede usarse perfectamente materiales como la celulosa o la perla de poliestireno.
- Si tenemos cámaras de menos de 5cm de espesor hay que actuar con perla de poliestireno ya que es el único sistema con el cual podemos garantizar el relleno completo de la cámara.